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La evolución enseña que la selección natural solamente preserva las mutaciones genéticas que son usables para la sobrevivencia de las especies. Sin embargo, como podemos ver, la teoría de la evolución no puede explicar la enorme cantidad de maravillas biológicas que se encuentran en la naturaleza.
Ya que la visibilidad debajo del agua es bastante limitada, la teoría de la evolución sugiere que los peces habían evolucionado con pobre visión, dependiendo de otros sentidos. Desafortunadamente para la evolución, los tiburones tienen una visión extraordinaria, con ojos diseñados para tener una visión excelente en varias condiciones de luz, color y diversas distancias. El ojo del tiburón se puede dilatar y contraer rápidamente, ajustándose fácilmente a los diferentes niveles de luz a diferentes profundidades. Teniendo doble retina con células en forma de bastones y conos, los ojos del tiburón son 10 veces más sensitivos a bajas condiciones de luz que nuestros ojos. |
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Mas remarcable es la estructura localizada detrás de la retina del tiburón, que se encuentra solamente en animales nocturnos como los gatos -tapetum lucidum es un complejo tejido ubicado en la parte posterior de los ojos de algunos animales que hace que el ojo pueda absorber una gran cantidad de luz antes de llegar a la retina. Después que la luz pasa a través de la retina del tiburón, esta estructura como espejo refleja la luz hacia fuera, reestimulando la retina al pasar a través de ella habilitando una visión excelente, incluso en la noche. En condiciones donde hay mucha luz, células especiales que contienen un pigmento negro cubren este espejo para mantener la baja percepción de los niveles de luz y que no sean tan intensos. ¿Cómo es posible que una estructura tan perfecta, funcional, e ingeniosa se haya desarrollado por accidente y en etapas?
La Biblia enseña que el todo sabio Creador creo todas las cosas vivas de acuerdo a su propia especie, dando a cada especie cada habilidad especial que necesita, y nada más. Por lo tanto no debería ser una sorpresa cuando la naturaleza nos muestra cosas que la teoría de la evolución no puede explicar. Así como el entendimiento en la ciencia de biología crece, la evidencia se va acumulando la cual apoya la idea Bíblica de una creación altamente ordenada y cuidadosamente diseñada.
Bibliografía
Maniguet, X. 1992. The Jaws of Death: Shark as Predator, Man as Prey (mandíbulas de la muerte: Tiburon como predador, hombre como presa). (Translated by David A. Christie). Crescent Books, Avenel, NJ, pp. 54–85.
Fotografia:
A white-tip shark (Tiburón de nariz blanca) - (Triaenodon obesus).
Image ID: reef0724. Photographer: Dr. Dwayne Meadows.
Courtesy of the National Oceanic and Atmospheric Administration/Department of Commerce. (Cortesía de la Administración Nacional y Atmosférica/ Departamento de Comercio.)
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